Jennifer López se está entregando a su trabajo (y a su rutina de ejercicios) mientras continúan circulando rumores de que su matrimonio con Ben Affleck se dirige al divorcio.

El jueves, la cantante, de 54 años, fue vista saliendo de un estudio de danza en Los Ángeles después de otro ensayo agotador antes de que comience su gira en junio.

Tenía sus abdominales cincelados a la vista con un top corto de color amarillo brillante mientras caminaba hacia su camioneta estacionada.

Mientras tanto, Affleck, de 51 años, se dio un capricho feliz el jueves cuando se le vio fumando un cigarrillo en su coche antes de pedir pizza en su mansión de alquiler de 100.000 dólares al mes en Brentwood.

Ha estado viviendo en la propiedad, ubicada a solo dos cuadras de su ex Jennifer Garner , durante las últimas semanas mientras filma su nueva película The Accountant 2 en medio de los rumores de separación de JLo.

Se ha afirmado que Affleck y López chocaron por sus puntos de vista sobre la atención del público después de que ella ventilara detalles íntimos de su romance reavivado en su documental Prime Video que se lanzó en abril.

Lució sus gafas de sol favoritas de la era Y2K con grandes aros dorados y una manicura rosa nacarada fresca.

López también usó el anillo de bodas que Affleck le regaló cuando se casaron en julio de 2022.

A ella se unió su manager de toda la vida, Benny Medina, quien permaneció al lado de la cantante mientras entraban y salían del estudio de baile.

Cuando no estaba charlando con Benny o dando indicaciones a otros miembros de su séquito, López tenía su teléfono celular pegado a su oreja.

Más tarde, Affleck se dirigió al set de su nueva película The Accountant 2, donde fue fotografiado sin su anillo de bodas.

También el jueves, López recurrió a Instagram para compartir un atrevido mensaje con sus 252 millones de seguidores.