Esta foto de un niño africano se ha vuelto viral: mira cómo resultó su vida.

La mujer ha estado haciendo trabajo voluntario durante muchos años y a menudo visita países donde se necesita ayuda voluntaria.

En esta imagen, Anja dejó una nota en la que hablaba del destino del niño. Sus propios padres lo echaron a la calle, ya que lo acusaron de brujería.

En ese momento, vivía en la comunidad un grupo de estafadores que persuadían a muchos padres de que sus hijos eran hechiceros y ofrecían “curar” al bebé por una gran suma.

Pero la familia de este niño decidió simplemente abandonarlo…

Durante 8 meses, el niño vivió en la calle y comió lo que encontraba en las calles.

Pero tuvo la suerte de conocer a Anja, quien se llevó al niño con ella a Dinamarca y lo alojó en su propio refugio, donde ya vivían los mismos “abandonados” de Nigeria.

Inicialmente, el niño estaba muy atrasado en su desarrollo en comparación con sus compañeros y no podía ganar el peso necesario.

Pero con el tiempo, comenzó a mejorar.

Y ahora tiene muchos amigos en la nueva escuela, es un buen estudiante y espera que en el futuro también ayude a los niños pobres.