LUPILLO RIVERA ROMPE EN LLANTO AL NARRAR LA DOLOROSA PéRDIDA DE SU HERMANA, JENNI RIVERA.

Lupillo Rivera nos dejó con un nudo en la garganta al relatar a detalle cómo vivieron él y todo la familia la muerte de Jenni Rivera.

Como pocas veces, Lupillo Rivera llora tras recordar la dolorosa pérdida de su hermana Jenni Rivera. Confesó cada detalle desde cómo recibió la noticia hasta el momento final.

En entrevista con Yordi Rosado y con un nudo en la garganta, ‘El toro del corrido’ habló por primera vez tan abiertamente de todo.

“Yo estaba en Norte Carolina. Recibo una llamada de Gabriel Roa y me dice: – Compa Lupe, tenemos un problema grave. No encontramos el avión de tu hermana. Y a mí me dijo el gobierno mexicano que hablara con alguien que conozca bien a Jenni y nada más con esa persona quieren hablar”.

Lupillo Rivera tuvo que ser fuerte y decir a la familia lo que pasaba con Jenni Rivera

“A mí no me tocó de otra más que ser frío. Yo no podía llorar, no podía desahogarme, yo tenía que ser frío, nadie me dio la oportunidad”.

Explicó que fue él quien habló con sus hermanos y les pidió que le desconectaran a su mamá la televisión, el radio, el celular. Y con sus hijas para que hicieran lo mismo con sus primos, Chiquis, Jaqckie, todo hasta saber lo que pasaba en realidad, mientras él no podía con la desesperación.

¿Cómo le dijeron a Lupillo Rivera la verdad?

“Gabo me dijo llorando: – Sí, confirmaron la muerte de tu hermana-. Pff. Me acuerdo que aventé el teléfono y corrí hacía la carretera. Todos los de la banda andaban conmigo, me dicen:- Pe’rate wey, pe’rate-. Y todos cuidándome no’mas. Recuerdo que cuando iba corriendo, uno de ellos me alcanzó a tumbar y me detuvo.

Le llamé a mi papá: -Pa’-.

-¿Qué pasó hijo? Aquí con los nervios ya ves. ¿Qué traes cabr0n? ¿Estás llorando? ¿Qué tienes?-.

–No a’pa-.

-Amárrese los p1nches huev0s y dígame-.

-No puedo-

-Me vas a decir cabr0n-

Y yo ya llorando: – No pues sí. Confirmaron la muerte de Jenni a’pa-. Y soltó el llanto mi papá.

Ya el gobierno mexicano me dijo: -Váyase con su familia, nosotros le vamos a decir si ocupamos que venga para Monterrey-.

Aterrizando, me llamaron: – Necesitamos que venga para Monterrey, para hacerle el ADN y saber si los restos de su hermana son de ella o no-.

Para Lupillo lo más duro fue entregar a su hermana

Luego de que le entregaran la prueba de ADN y les confirmaran que los restos encontrados eran Jenni. Lupillo y sus hermanos llevaron los restos a su casa en Estados Unidos. Fue ahí donde de nueva cuenta tuvo que enfrentar a sus padres y decirles que traían los restos de Jenni.

Con el sentimiento en la garganta Lupillo Rivera llora dice que en ese momento ya no pudo más con lo que le pasó a Jenni. Le pidió al gobierno que se pusiera en contacto con su papá y sus hermanos y él se fue. Estuvo sólo y tomando a diario.

“Eso de mi hermana, fue lo más difícil que he vivido en mi vida y lo más triste de mi vida. Lo más triste de mi vida, ver esa mirada de mi papá con la ilusión de que entrara con mi hermana y tener que decirle a mi a’pa: – Sí se murió mi hermana-.

Uno va queriendo sanar, queriendo crecer, salir adelante, buscarle y ese dolor nunca se olvida. El primer paso que doy en la mañana (señala arriba), el primer pensamiento (señala arriba). Y he aprendido a vivir con eso, pero el dolor no se olvida, está presente”.