Después de presentar a su madrastra, dejó a su pequeño niño con ella. Pero al regresar y entrar… ¡no pudo creerlo!

Carlos, un joven padre soltero, había comenzado una nueva etapa en su vida tras casarse con Elena, una mujer dulce y carismática que se convirtió en su compañera tras años de soledad. Aunque su hijo, Matías, de solo 5 años, era muy tímido, Carlos decidió confiar en Elena y los dejó juntos para que pasaran tiempo mientras él resolvía algunos asuntos importantes.

Horas después, al regresar a casa, Carlos abrió la puerta y se encontró con una escena que lo dejó completamente atónito. La sala estaba llena de risas, colores y juguetes. Pero lo más impactante fue ver a Matías, quien solía ser reservado y reacio a abrirse con desconocidos, corriendo felizmente mientras Elena, con un disfraz de superhéroe, jugaba con él como si siempre hubieran sido una familia.

Carlos observó en silencio por un momento, emocionado al ver cómo su hijo se había encariñado con su nueva madrastra en tan poco tiempo. Pero lo que más lo conmovió fue escuchar a Matías gritar mientras abrazaba a Elena:
—¡Te quiero, mamá!

Elena, con lágrimas en los ojos, respondió:
—Y yo te quiero a ti, campeón. Siempre estaré aquí para cuidarte.

Carlos entró a la sala con una sonrisa, incapaz de contener la emoción. En ese instante, supo que había tomado la mejor decisión al incluir a Elena en sus vidas. Ese día marcó el inicio de una nueva etapa llena de amor y unión, donde un simple acto de confianza transformó tres vidas para siempre.