Hace quince días, el mundo de la música mexicana perdió a una de sus voces más queridas: Dulce. La aclamada cantante, conocida por sus baladas románticas y su poderosa voz, falleció el 25 de diciembre de 2024 tras una valiente lucha contra el cáncer. Su muerte dejó un vacío profundo en sus fanáticos, amigos y familiares, especialmente en su hija Romina, quien, durante este tiempo, mantuvo un silencio absoluto sobre los detalles de los últimos días de su madre.

Hija de Dulce rompe el silencio tras ser acusada de agredir a su propia  madre: hace

Dulce había sido diagnosticada con metástasis pulmonar, una complicación de su lucha contra el cáncer, que desafortunadamente fue irreversible. A pesar de su enfermedad, la cantante mostró una resiliencia admirable, manteniendo su compromiso con la música y sus seguidores hasta sus últimos días. La víspera de Navidad, compartió una cálida cena con su hija Romina y algunos amigos cercanos, en la que incluso mostró signos de mejora tras recibir tratamiento. Sin embargo, su salud empeoró repentinamente el 25 de diciembre, un día que comenzó con esperanzas renovadas, pero terminó con la pérdida de una estrella inmensa de la música mexicana.

Romina, su hija, quien estuvo a su lado durante sus últimos momentos, ha enfrentado una carga emocional enorme. La tristeza que experimentó fue palpable; sin embargo, su silencio ante los medios sobre la relación con su madre ha dado pie a especulaciones. Mientras algunos creían que ambas compartían un vínculo cercano, otros han señalado posibles tensiones no resueltas entre madre e hija. Recientemente, Romina rompió su silencio, pero su revelación dejó más preguntas que respuestas sobre las razones detrás de su distanciamiento.

El día de la muerte de Dulce, su amigo Iván Cochegrus compartió un emotivo testimonio sobre las horas previas, destacando la fortaleza y el ánimo que la cantante mantenía a pesar de su enfermedad. Fue un testamento a su valentía y su amor por la vida. Sin embargo, el destino jugó una carta cruel, arrebatándole la vida en un giro inesperado que dejó a todos en estado de shock.

El legado musical de Dulce perdurará. Sus icónicos éxitos como “Lobo” y “Navidad Sin Ti” siguen siendo emblemas de la música romántica mexicana. La partida de Dulce marca el fin de un capítulo inolvidable en la música mexicana, pero su espíritu seguirá viviendo en las canciones que dejó para generaciones de oyentes.

A través de su música y valentía, Dulce se convirtió en un símbolo de perseverancia, demostrando que, incluso en los momentos más oscuros, el amor por su carrera y por sus seguidores nunca desapareció. Su legado seguirá siendo recordado no solo por su voz, sino por su fortaleza ante la adversidad.