Chiquis Rivera, la hija mayor de la icónica cantante Jenni Rivera, ha causado una gran polémica en las redes sociales al revelar el precio que cobra por una fotografía con sus seguidores después de sus conciertos: 40 dólares.

Esta declaración ha generado un intenso debate, especialmente después de que el reconocido cantante Ramón Ayala recibiera críticas por cobrar 20 dólares por una foto similar.

La justificación de Chiquis se centra en los costos asociados con su carrera artística, como el vestuario, el pago a su equipo y los gastos de promoción.

Además, menciona que parte de ese dinero se destina a obras benéficas, aunque esto no ha calmado las críticas en las redes sociales.

La cantante argumenta que, a pesar del cansancio después de sus presentaciones, siempre brinda sonrisas, abrazos y besos a sus seguidores durante estas sesiones de fotos pagadas.

Ella compara su situación con la de los fans que pagan sumas considerablemente más altas para conocer a otras estrellas de la música, como Justin Bieber.

Chiquis enfatiza que solo cobra por las fotos después de sus shows y no cuando la encuentran en la calle.

Sin embargo, a pesar de sus explicaciones, algunos usuarios de redes sociales continúan cuestionando su decisión de cobrar por las fotos, especialmente considerando su origen en una familia con recursos y fama.

A pesar de las críticas, Chiquis sostiene que estas fotos después de sus presentaciones son más íntimas y significativas para los fans, justificando así el cobro.