En el mundo del teatro y la actuación, la frase “el show debe continuar” se toma muy en serio. Pero, ¿qué pasa cuando un actor se enfrenta a un desafío físico extremo justo antes de una importante presentación?

Lucero Mijares, la talentosa hija de los reconocidos artistas Lucero y Manuel Mijares, ha demostrado que la dedicación y el amor por su arte pueden superar incluso las adversidades más dolorosas.

Todo comenzó dos días antes del estreno de una obra de teatro, cuando Lucero sufrió una caída en las escaleras del teatro, mientras bajaba para ponerse el micrófono. Lo que parecía una torcedura resultó ser una fractura de la tibia. En medio de la confusión y el dolor, Lucero mantuvo una actitud sorprendente: decidió no cancelar la obra.

En el momento del accidente, tanto Manuel como Lucero Aguilar, su madre, se preocuparon más por cómo mantener la continuidad de su actuación que por la gravedad de la lesión. “Ella no va a querer parar de hacer lo que está haciendo”, dijo su madre, anticipando la fuerte determinación de su hija.

A pesar del diagnóstico de fractura, Lucero insistió en seguir adelante con la función. Con su pie enyesado y vendado, se subió al escenario y continuó con la actuación programada, demostrando una valentía y compromiso admirables. Su actitud estoica sorprendió a todos, incluido el productor Juan y el doctor Óscar Acosta, quienes le brindaron el apoyo necesario para que pudiera continuar.

Lucero compartió que, aunque la caída fue “tontísima”, el dolor no fue insoportable al principio. Sin embargo, la decisión de seguir adelante no fue fácil. “Me quedan dos horas de sufrimiento total”, pensó al iniciar la función. Durante la obra, que requería movimientos constantes y energéticos, Lucero se mantuvo firme, a pesar del dolor creciente.

El momento culminante llegó cuando tuvo que dar tres zapatazos en el escenario, una tarea especialmente desafiante con su fractura. A pesar de las dificultades, Lucero concluyó la obra y fue llevada al hospital, donde se confirmó la fractura y se le recomendó mantener el pie inmovilizado por al menos cuatro semanas.



 

Lucerito cuenta cómo Mijares la rescató en su 1er día de prepa | Saga Live  - YouTube

El director y el equipo de producción, tras conocer la noticia, decidieron seguir adelante con la obra. Adaptaron rápidamente las coreografías y movimientos para acomodar el carrito que Lucero usaría para desplazarse. La joven actriz ensayó incansablemente con su nuevo “vehículo”, demostrando una capacidad de adaptación y profesionalismo notables.

La historia de Lucero Mijares es un testimonio de su dedicación y pasión por el teatro. A pesar de las adversidades físicas, mantuvo su compromiso con su arte y su equipo. “Cualquier otro actor habría decidido irse a casa”, comentó su madre, subrayando la excepcional fortaleza y determinación de su hija.

La experiencia de Lucero Mijares ofrece una valiosa lección de resiliencia y pasión. En su primera participación profesional en el teatro, no solo tuvo que enfrentar los desafíos habituales de un debut, sino también superar una significativa barrera física. Su historia inspira a todos aquellos que enfrentan obstáculos en la búsqueda de sus sueños, recordándonos que con determinación y amor por lo que hacemos, podemos superar incluso las pruebas más difíciles.



 

Lucero ha demostrado que, en el mundo del teatro, el espectáculo realmente debe continuar, y su ejemplo de valentía y dedicación quedará grabado en la memoria de todos aquellos que presenciaron su increíble actuación.

Cuando Lucero Mijares se fracturó el pie el día de su función de teatro |  Saga Live