La actriz confesó sentirse culpable de haber abandonado a su madre y también reflexionó sobre su futuro como pareja de Channing Tatum

En una reveladora entrevista con Esquire, la actriz y directora Zoë Kravitz ofreció una mirada profunda a su niñez y las difíciles decisiones que tomó al crecer con sus famosos padres, Lisa Bonet y Lenny Kravitz. La intérprete de Selina Kyle (Alias Catwoman) en The Batman, rememoró cómo su vida cambió drásticamente al mudarse con su padre a los once años, tras el divorcio de sus progenitores.

“Era este torbellino de un universo completamente diferente”, explicó la actriz sobre las visitas de su padre, quien estaba en el apogeo de su carrera. Zoë describió el contraste entre la vida simple y tranquila con su madre y el estilo de vida veloz y embriagador de su padre rockero. “No es que a mi papá no le importara; solo le importaban cosas diferentes”, afirmó la actriz a Esquire, subrayando que ese estilo de vida acelerado la hizo madurar rápidamente.

Zoë Kravitz, quien es judía y afroamericana por ambos lados de su familia, también detalló la lucha que enfrentó para encajar en una comunidad en Miami. En un esfuerzo por encontrar su lugar, presionó a su padre para mudarse a Nueva York, donde finalmente se sintió aceptada. “Inscribirme en la Rudolf Steiner School me permitió encontrar a mis iguales. Eran raros como yo”, recordó la actriz, señalando su participación en el club de teatro.

La vida de Kravitz en Nueva York era intensa y llena de aventuras. A menudo salía de noche, aprovechando la ausencia de su padre cuando estaba de gira. “No sé ni a dónde iba, pero salía”, mencionó, destacando cómo sus familiares se turnaban para cuidarla.

Sin embargo, mirando hacia atrás, Zoë confesó sentirse culpable por su decisión de dejar a su madre. “Creo que fue muy doloroso que me mudara de su casa para estar con mi papá y él ni siquiera estaba allí”, dijo a la revista. Aunque no desea haber tomado otra decisión, indicó que ahora aprecia más los esfuerzos de su madre: “Ella estaba tan enfocada en preservar mi inocencia y creatividad. Quería protegerme del mundo porque sabía que eso no se recobraba”, reflexionó.

Zoë y su futuro con Channing Tatum

Además, Kravitz compartió detalles sobre su relación con su prometido, Channing Tatum, y su visión sobre tener hijos. La pareja se conoció mientras trabajaban juntos en su debut como directora en la película: Parpadea dos veces (Blink Twice). Contrario a lo que dice su padre en entrevistas, la actriz puntualizó que la boda no será el próximo año.

“Hay mucha presión sobre las mujeres para tener hijos, y si no los tienes, parece que no tienes un propósito”, afirmó la actriz. Sin embargo, admitió estar indecisa sobre la maternidad. “Tenía que preguntarme realmente, ¿qué es lo que quiero?”, recordó sobre su reflexión la artista de 35 años.

De acuerdo con People, Tatum describió la experiencia de trabajar con Kravitz en su película como “una de las cosas más gratificantes, además de tener un hijo con alguien”. Añadió que el proceso creativo junto a ella fue semejante a crear un matrimonio, donde cada elemento de sus vidas se integraba en este proyecto compartido.

En el estreno en Los Ángeles de “Blink Twice”, Kravitz expresó su admiración y agradecimiento hacia Tatum durante su discurso. “Me apoyaste en todos los sentidos, desde la producción hasta las conversaciones motivadoras cuando lloraba en el piso del baño. Gracias por tu paciencia”, declaró la actriz.

En una conversación con EsquireTatum también destacó la confianza y cercanía que construyeron mientras hacían la película: “Nos permitió apoyar y enfrentar cosas difíciles juntos, y fue hermoso”. La película, antes conocida como Pussy Island, cuenta con un elenco estelar que incluye a Naomi AckieAdria ArjonaHaley Joel Osment y Alia Shawkat.

La trama del film gira en torno a Frida, una camarera interpretada por Ackie, que se obsesiona con Slater King (Tatum) y viaja a su isla privada, donde las cosas no salen bien. El estreno de Parpadea dos veces está programado para el 23 de agosto.