El villano de telenovelas reveló a quién se parecen Roberto y Eduardo, gemelos que procreó con la actriz.

 

Eduardo Santamarina abrió su corazón sobre la relación que mantiene con su exesposa Itatí Cantoral y sobre los hijos que procreó con ella, los gemelos Roberto y Eduardo.

 

En entrevista con Berenice Ortiz, el villano de la telenovela ‘Nadie como tú’ habló de los jóvenes de 23 años, destapando la verdad sobre sus primogénitos, quienes afirmó heredaron la personalidad de sus abuelas.

“ Yo les digo ‘ni parecen mis hijos’, para cómo fui yo y luego su mamá también para cómo fue, sí digo ‘¿a quién salieron estos?’. Luego le rascas atrás y dices los abuelos tampoco, mi papá le decían ‘El Tigre’, sabes a quién salieron a las abuelas”, precisó entre risas.

Eduardo Santamarina confesó que, a diferencia de su personalidad, sus dos hijos mayores son muy ‘hogareños’ y evitaron a toda costa las fiestas desde que eran adolescentes.

“ Roberto y Eduardo muy hogareños, no fueron a reventones, nada, no iban a los campamentos de la escuela, muy hogareños y hasta la fecha, entonces decimos ‘estos a quién salieron’”, señaló entre risas.

¿Eduardo Santamarina ya no le habla a Itatí Cantoral?

Al ser cuestionado sobre su exesposa, Eduardo Santamarina se sinceró y reveló cómo es su relación actual con Itatí Cantoral, con quien estuvo casado del 2000 al 2004, año en que hicieron oficial su divorcio en medio de rumores de infidelidad del actor con Susana González.

El hoy esposo de Mayrín Villanueva destacó que le tiene un cariño muy especial a la actriz y que su relación, actualmente, es de mucho respeto.

“Sí (el cariño se mantiene), ya muchos años, que nos ha costado (llevarnos bien), nos costó porque como toda separación al principio pues es de ‘ta ta ta’, con batucada y todo, terrible, pero pasan los años y ahora ya un profundo respeto sobre todo”, aseguró.

Eduardo Santamarina detalló que, a la fecha, ya no tiene tanta comunicación con Itatí Cantoral como hace años, cuando sus hijos eran menores de edad y tenían que acordar cada una de las decisiones sobre Roberto y Eduardo con ella.

“Nuestros hijos ya están grandes, entonces ella ya no me tiene que consultar nada, ni yo a ella, entonces lo que necesito hablar con ellos, lo hablo directamente con ellos, no con su mamá”, sentenció.