Vicente Fernández, conocido como «El Charro de Huentitán», no solo fue reconocido por su destacada carrera artística y musical, sino también por haber acumulado un significativo patrimonio económico durante su vida. Tras su muerte, su viuda,

Doña Cuquita, ha dejado claro que será la encargada de administrar este legado, contando con el respaldo y respeto de sus tres hijos.

En declaraciones a TV Azteca, Doña Cuquita aseguró que Vicente dejó todo perfectamente organizado y que no habrá disputas por la herencia, ya que ella respetará fielmente los deseos de su difunto esposo.

Alejandro Fernández, uno de los hijos de Vicente, ha expresado que su padre siempre fue previsor y había preparado su testamento con antelación para asegurar la unidad familiar incluso después de su partida.

Alejandro mencionó que, aunque él aún no tiene un testamento completamente definido, ha comenzado a discutir este tema con sus representantes legales y financieros para asegurar una transición ordenada de sus bienes.

La viuda de Vicente, en tono ligero pero respetuoso, enfatizó que todo está dividido conforme a la voluntad de Vicente y que no tiene intención de cambiar nada, a pesar de tener el control actual sobre los recursos.

Este enfoque de Doña Cuquita ha sido recibido con aceptación por parte de los hijos de Vicente, quienes valoran y apoyan su papel como administradora del patrimonio familiar.

Vicente Fernández, quien falleció en diciembre de 2021, dejó un legado no solo en términos de música y cultura, sino también en la forma en que manejó su éxito y patrimonio.

Su visión a largo plazo y su preparación meticulosa han sido destacadas tanto por su viuda como por sus hijos, quienes continúan honrando su memoria y su legado.

La situación ha servido también para abrir un diálogo sobre la importancia de la planificación testamentaria y la administración responsable de los recursos familiares entre generaciones.