El hijo mayor de Pepe Aguilar revela su admiración por la rapera argentina y enfrenta críticas por su independencia en medio de tensiones familiares

Emiliano Aguilar, el hijo mayor del icónico Pepe Aguilar, ha vuelto a capturar la atención del público tras su reciente transmisión en vivo en Instagram. La ocasión no solo sirvió para presentar su nuevo sencillo, sino que también se convirtió en el escenario de una serie de revelaciones y controversias que han sacudido el panorama mediático.

En el centro del torbellino se encuentra su supuesto interés en la rapera argentina Cazzu, exnovia de Christian Nodal, el cuñado de su hermana Ángela Aguilar. Emiliano no dudó en expresar su admiración por Cazzu durante la transmisión, sugiriendo una posible colaboración musical con la artista. “Me cae bien, tiene buenas rolas. Nunca la he conocido, pero sí me aventaría una colaboración con ella”, confesó Aguilar, dejando claro su deseo de unir fuerzas con la estrella del trap, a pesar de no haber tenido contacto previo con ella.

El interés de Emiliano en Cazzu no pasó desapercibido y provocó una ola de especulación. Su anterior comentario en redes sociales, lleno de emojis de fuego en una publicación de Cazzu, desató rumores de un posible conflicto familiar, especialmente al no haber sido invitado a la muy publicitada boda de Ángela Aguilar y Christian Nodal. La desaparición repentina del comentario encendió las llamas de la especulación sobre una posible reprimenda por parte de su famoso padre.

Además de su interés en CazzuEmiliano se adentró en el terreno personal durante la transmisión. Habló abiertamente sobre su decisión de mantenerse al margen de la influencia de su padre y sus hermanos, quienes siguen el camino del regional mexicano. “Me estoy aventando esto solo”, afirmó, resaltando su deseo de construir una carrera independiente a pesar de enfrentar dificultades económicas. Emiliano reveló que ha recurrido a trabajos de albañilería y plomería en Estados Unidos para salir adelante, sin pedir nunca ayuda financiera a su padre. “Nunca le he pedido ni un centavo a mi papá”, dijo con firmeza, destacando su determinación por forjar su propio camino.

Su trayectoria artística ha sido objeto de intenso debate, con críticos que cuestionan la autenticidad de su música debido a su prestigioso apellido. Emiliano, consciente de las críticas, abordó el tema con una reflexión aguda: “Piensan que nací allá y pues no es así”. En su visión, el apellido Aguilar representa tanto una bendición como una maldición, reflejando la doble moral que a veces rodea la autenticidad en la música.

Con cada nueva revelación y comentario, Emiliano Aguilar sigue desafiando las expectativas y sumando capítulos a su compleja y enigmática historia personal y profesional. ¿Logrará superar las barreras que enfrenta y hacer su propio nombre en la industria musical? Solo el tiempo lo dirá.