El dúo madre-hijo habló sobre sus preferencias alimentarias.

 Sofia Vergara and son Manolo Gonzalez Vergara

Sofía Vergara y Manolo González Vergara son conocidos por tener una de las mejores relaciones madre-hijo. La actriz y el empresario son cercanos no solo en su vida personal sino también en los negocios que hacen juntos.

Sofía reveló anteriormente que se centró en pasar tiempo de calidad con su hijo después de dar a luz a los 19 años, mientras seguía con su carrera profesional. La actriz le dijo recientemente a Us Weekly que Manolo se volvió muy independiente a medida que crecía.

“Nunca cociné [cuando él era pequeño], así que tuvo que crear sus propios recuerdos gastronómicos”, dijo Sofía. “El Día de Acción de Gracias, por ejemplo, mi madre siempre cocina”, agregó Manolo. “Él cocina pavo para todos, como 30, 40 personas, y siempre lo ha hecho desde que tiene 14 años”, explicó Sofía.

Sofi­a Vergara and Manolo Gonzalez Vergara

“Nos vemos casi todos los días. Ella cuida a mi perro. Yo cuido al de ella”, dijo Manolo sobre su estrecha relación, y Sofía agregó que “no hay ningún conflicto” en lo que respecta a su vida personal. También se les preguntó a la pareja sobre su vida amorosa, a lo que Sofía dijo que todavía está “un poco soltera” a pesar de que la relacionan con el cirujano ortopédico Justin Saliman.

Justin Saliman and Sofia Vergara are seen at Giorgio Baldi restaurant

“Hay gente buena en todas partes. Hay que saber dónde buscar”, dijo Manolo después de que le preguntaran si la ciudad de Nueva York era un mejor lugar para tener citas. “Totalmente. De hecho, ayer hablé de eso porque ahora estoy soltera, así que… un poco soltera. [Risas.] En fin”, admitió.

Manolo Gonzalez and Sofia Vegara arrive for the 68th Emmy Awards

Sofía continuó: “Pero siento que hay un grupo de personas más diverso en Nueva York que en Los Ángeles porque la mayoría de la gente está en el mundo del espectáculo. Aquí hay gente de todo el mundo: arquitectos, escritores, actores, empresarios”.

El dúo madre-hijo habló sobre sus preferencias alimenticias. “Odio la comida salada porque siento que cubre el sabor y también me hace sentir hinchada al día siguiente. ¡Retención de líquidos!”, dijo Sofía mientras Manolo confesó que él es “un poco más abierto. ¡Mira la sal y se asusta!”.