A sus 92 años, Cristian Martel, quien en su juventud deslumbró como una de las figuras más radiantes del cine mexicano, está lista para alzar la voz y compartir su fascinante historia. Coronada como Miss Universo en 1953, Cristian conquistó al mundo no solo con su impresionante belleza, sino también con su carisma y destreza innata. Hoy, después de décadas bajo la mirada pública, y tras haber atravesado una vida llena de giros inesperados, se atreve a revelar detalles de su pasado, sus relaciones sentimentales y las anécdotas desconocidas que marcaron su trayectoria.

Cristian Martel nació como Christiane Magnani en el pequeño pueblo de Pi, en el departamento de Etel, Francia. Desde niña, mostró una fuerte inclinación hacia el arte y la belleza. A los cuatro años, su familia se trasladó a Loden, en el departamento de Vi, donde continuó su camino hacia la notoriedad. Su entorno familiar tampoco estaba alejado del mundo del espectáculo: su hermana mayor, Renom, se casó con el reconocido cineasta estadounidense Vicente Minnelli en 1954. Aunque su matrimonio terminó en divorcio en 1957, este vínculo con el cine marcó la vida de la familia.

Desde temprana edad, Cristian destacó en concursos de belleza, logrando títulos como Miss Chatel y Miss Center, lo que la consolidó como la italiana más bella de Francia. Este reconocimiento la catapultó a una carrera exitosa. En 1953, con grandes sueños en mente, Cristian se mudó a París para perseguir su carrera actoral. Fue entonces cuando adoptó el nombre artístico de Cristian Martel, inspirado por Carlos Martel, líder histórico de los francos, y como una forma de rendir homenaje a las ciudades de Chattel Roll y Poer que marcaron su niñez. Este nombre artístico se convertiría en el que la catapultaría a la fama.

En ese mismo año, Cristian ganó el título de Miss Cinema, otorgado por la revista cinematográfica francesa del mismo nombre, lo que abrió puertas importantes para ella. Este reconocimiento la colocó en la mira de los principales productores del cine europeo, pero la gran oportunidad llegaría cuando se presentó un hueco en el certamen de Miss Universo. La Miss Francia de ese año, Sylviane Carpentier, quien había sido finalista en Miss Europa y estaba comprometida, decidió no participar. De esta manera, Cristian, quien ya había sido coronada Miss Cinema, fue seleccionada para representar a Francia en el certamen de Miss Universo de 1953, que se celebraba en Long Beach, California.

Con tan solo 17 años, Cristian Martel cautivó a todos con su elegancia, seguridad y belleza única. El 18 de julio de 1953, fue coronada como Miss Universo, convirtiéndose en la primera francesa en lograr este prestigioso título. Su victoria fue un hito histórico, pues hasta la coronación de Iris Mittenaere en 2017, Cristian fue la única francesa en ostentar el título.

Su victoria en Miss Universo no solo marcó un logro personal, sino que abrió el camino para futuras generaciones de reinas de belleza francesas. Su ascenso en el mundo de la belleza y el cine es un testimonio de perseverancia, determinación y sueños cumplidos. Sin embargo, la historia de Cristian Martel no se limitó solo a la fama y el glamour; su vida estuvo marcada por un gran amor inesperado, el que vivió con Miguel Alemán Velasco, hijo del expresidente mexicano Miguel Alemán Valdés.

En 1953, tras ganar el certamen de Miss Universo, Cristian realizó una gira mundial que la llevó a México. Durante su visita, fue invitada por el actor Emilio “El Indio” Fernández a una comida en su casa, donde conoció a un joven encantador llamado Miguel Alemán Velasco. A pesar de que Cristian no dominaba el español, Miguel, que hablaba francés, le ayudó a comprender las conversaciones y juntos compartieron un momento agradable. Esta interacción se convirtió en la chispa que encendió una relación marcada por el amor, la diversión y el coqueteo. Cristian, intrigada por su simpatía, descubrió después que Miguel era el hijo de un expresidente, algo que la sorprendió, pues nunca imaginó que el hijo de un político fuera tan humilde y encantador.

La relación entre Cristian y Miguel enfrentó numerosos obstáculos, especialmente la desaprobación de la familia conservadora de Miguel. A pesar de estos desafíos y del compromiso previo de Miguel con otra mujer, ambos lucharon por su amor y trabajaron para ganarse la aceptación de sus respectivas familias. Después de siete años de altibajos, finalmente se casaron en una ceremonia íntima en 1961. Juntos, formaron una familia con tres hijos, Carla, Mónica y Miguel Alemán Magnan.

El amor entre Cristian Martel y Miguel Alemán Velasco es un testimonio de cómo el amor puede superar las barreras sociales y familiares. A lo largo de su vida, enfrentaron momentos difíciles, como amenazas de muerte en 2023, pero su compromiso mutuo nunca flaqueó, consolidándose como una de las parejas más queridas y admiradas de la historia reciente de México. Su historia, además de ser una de amor, es también una de resiliencia, que dejó una marca significativa en los mundos de la belleza, el cine y la política mexicana.

Hoy, con 92 años, Cristian Martel continúa siendo un ícono de su tiempo, una figura que no solo brilló en el certamen de Miss Universo, sino que también dejó una huella imborrable en la cultura francesa y en el cine mexicano. Su vida y legado siguen siendo fuente de inspiración y admiración para muchos.